Cuando realizamos esfuerzo físico, ya sea por trabajo o deporte, nuestro cuerpo tiende a aumentar su temperatura. Esto se debe a que aproximadamente el 80% de la energía producida para la contracción muscular se libera en forma de calor.
Para poder disminuir dicha temperatura, el cuerpo recurre a la evaporación del sudor. Consiguiendo así enfriar nuestro núcleo interno.
¿Qué y cuánto perdemos durante la sudoración?
Cuando hablamos de sudoración, debemos tener presente que en este proceso influyen tanto las condiciones de la persona como el ambiente. De hecho está demostrado que existen diferencias notables entre hombres y mujeres.
Por ello establecer una cantidad aproximada se antoja difícil, aunque podemos indicar que la pérdida de sudor se establece entre 1 litro/hora y hasta 3 litros/hora.
¿Qué es la deshidratación?
Como hemos visto, la sudoración nos permite enfriar nuestro cuerpo. Sin embargo, con ello no sólo perdemos líquidos sino nutrientes fundamentales como hidratos de carbono, electrolítos….
Un exceso de sudoración nos puede conllevar un estado de deshidratación, que como final extremo puede ocasionar el fallecimiento. Por ello ser conscientes de ingerir líquidos durante y después del esfuerzo resulta clave para no tener consecuencias fatales.
A nivel deportivo, la deshidratación puede tener efectos como
- Disminución de la fuerza
- Menor evacuación del ácido láctico de la musculatura
- Menor energía aeróbica para el músculo.
¿Es la cerveza una buena solución contra la deshidratación?
Por esa pérdida de agua y de componentes esenciales, la bebida que ingiramos para rehidratarnos toma especial importancia. Es en este punto en el que el debate sobre el consumo de cerveza como bebida recuperadora post-ejercicio adquiere su mayor énfasis.
Para que una bebida sea considerada como bebida apta, según la SEMED y el CGCOM, debe poseer una serie de características como son:
- Aportar hidratos
- Reposición de electrolitos
- Reposición hídrica
Estas bases son las que hacen que la cerveza, en cualquiera de sus versiones incluidas las conocidas como isotónicas, no sean considerada como bebida propiamente recuperadora por las organizaciones especialista.
Si bien es cierto, como indica la Industria Cervecera, que además de la reposición hídrica la cerveza nos aporta nutrientes. Los porcentajes que representan y la presencia de alcohol dan pie a no incluirlas como bebidas adecuadas. Así como indicar que el alcohol tiene el efecto contrario al que buscamos.
Debemos destacar que el agua no es una bebidad que nos proporcione una recuperación completa, debiendo optar por bebidas especializadas siempre teniendo en cuenta nuestras necesidades y su composición.
